¿Qué superalimentos incluir en la dieta?

Los superalimentos, como su nombre indica, son alimentos cuyo valor nutricional los convierte en opciones particularmente atractivas desde el punto de vista de la salud debido a su alta concentración de antioxidantes, grasas saludables, vitaminas y minerales. Pueden contribuir significativamente al bienestar general y al funcionamiento óptimo del organismo cuando se incluyen como parte de una dieta equilibrada y variada.

¿A favor o en contra de los superalimentos?

Sin embargo, los superalimentos han recibido varias críticas. Mientras que unos los incorporan en sus recetas saludables, otros los consideran una moda pasajera. Y es que toda novedad, provoca entusiasmo para unos y rechazo para otros. Lo mismo sucedió cuando las patatas llegaron de América y fueron consideradas tanto veneno como la solución a la miseria y las hambrunas.

Por ejemplo la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) advierte que el término “superalimento” a veces se utiliza más como una estrategia de marketing que como una indicación científica sólida. Aunque es cierto que algunos alimentos pueden tener un alto perfil nutricional, ninguna comida puede, por sí sola, garantizar la prevención de enfermedades.

Es fundamental que estos superalimentos formen parte de una dieta equilibrada y saludable. Además de incorporar alimentos ricos en antioxidantes y grasas saludables, como los frutos secos o el aguacate, es crucial incluir una amplia gama de verduras, legumbres y frutas en la dieta diaria. La alimentación debe complementarse con otros hábitos saludables como la actividad física regular y un descanso adecuado.

¿Qué superalimentos existen?

A los superalimentos no se les agrega nada, ni nutrientes, ni aditivos. Además, a menudo se presentan crudos y proceden de la agricultura ecológica. Por eso gustan a las personas que confían en las ventajas de la alimentación natural.

La lista de superalimentos que han llegado al mercado español ya es extensa: en ella se encuentran arándanos, aceite de coco, ajo negro, açaí, aronia, azúcar de coco, baobab, bayas goji, cacao puro, camu-camu, chlorella, chía, cúrcuma, espirulina, hierba de trigo, kale, kuzu, lúcuma, maca, mangostán, matcha, mesquite, moringa, noni, semillas de cáñamo, zumo de granada, entre otros.

Algunos de los más destacados serían el açai, la cúrcuma, la graviola, el kale, la maca, la moringa y la espirulina.

Açai: El açai es un fruto morado originario de la selva amazónica y considerado un auténtico superalimento gracias a sus poderosos antioxidantes como las antocianinas, una valiosa fuente de fibra insoluble, lo cual lo convierte en un aliado para regular el tránsito intestinal. Por otro lado, el açai es rico en fitoesteroles, en vitaminas A, C y del grupo B así como en calcio y diversos minerales como el magnesio y el hierro. Por último, su contenido en grasas saludables como los ácidos grasos omega 3, 6 y 9, son beneficiosas para el corazón al reducir los niveles de colesterol LDL y promover la salud arterial.

Cúrcuma: Planta herbácea perenne de la familia Zingiberaceae, conocida científicamente como Curcuma longa. Es originaria del sudeste asiático, especialmente de la India e Indonesia, y es ampliamente cultivada en climas tropicales. La cúrcuma es conocida por su rizoma (raíz) de color amarillo anaranjado. Su componente más importante es la curcumina, que constituye aproximadamente el 2-8% del peso del rizoma seco. La curcumina inhibe varias moléculas que juegan un papel clave en la inflamación. Además, al estar considerado un superalimento, tiene otras propiedades como antioxidante, digestivas, etc.

Graviola: La graviola o guanábana es una planta de la que se obtienen unos frutos comestibles, originarios de zonas tropicales del Amazonas y Caribe, con una apariencia muy similar a las chirimoyas. Considerada como superalimento, destaca por su riqueza en más de 200 principios activos fitoquímicos que incluyen nutrientes esenciales como vitaminas, minerales, fibra y antioxidantes. Ayuda a regular el azúcar en sangre, combatir las células tumorales, mejorar el estreñimiento y con acción antioxidante.

Kale: Es un tipo de col de hoja rizada que forma parte de la familia de las brasicáceas también llamadas crucíferas. Es una hortaliza de hoja verde oscuro que ha ganado popularidad en las últimas décadas debido a sus numerosas propiedades nutricionales y beneficios para la salud. Es rica en fitonutrientes entre ellos los carotenoides, flavonoides, glucosinolatos, ácidos fenólicos, vitaminas, minerales, fibra, etc. Es un excelente antioxidante, regulador intestinal y hormonal y mejora la salud ocular y ósea.

Maca: Planta con una raíz de tipo tubérculo, originaria de Perú, que se ha extendido por todo el mundo por sus grandes propiedades. Es considerada un superalimento debido a su riqueza en vitaminas, proteínas, minerales, macamidas, fitoesteroles, entre otros nutrientes esenciales. Mejora el rendimiento físico, regula los cambios hormonales y ayuda a aumentar el deseo sexual para favorecer las relaciones íntimas.

Moringa: La moringa es una planta originaria de la India y apreciada por culturas milenarias. Es conocida por sus propiedades medicinales y nutricionales. Sus hojas, semillas, corteza y raíz contienen una elevada cantidad de compuestos bioactivos, incluyendo 46 antioxidantes distintos, que la convierten en una de las fuentes más ricas en vitamina C, betacaroteno, quercetina y ácido clorogénico, entre otros. Las hojas son una fuente rica de vitaminas (A, C, K y del grupo B), minerales (calcio, potasio, hierro y magnesio), proteínas y aminoácidos esenciales. Mejora y aumenta las defensas del cuerpo, con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.

Espirulina: La espirulina es un alga que proviene del desierto de Atacama, una de las zonas más puras del planeta donde se encuentra la Pampa del Tamarugal, una llanura con gran riqueza acuífera. Por otro lado, el secado del alga es casi instantáneo ya que el clima es extremadamente seco y la humedad muy baja con lo que se preservan todos los componentes frágiles y sensibles a la temperatura. Ofrece múltiples beneficios a nuestro organismo y muy especialmente como estimulador de la energía y la vitalidad. Un claro ejemplo de lo beneficioso que resulta este tipo de microalga, es que ha sido elegida por la NASA para potenciar y enriquecer la dieta de los astronautas mientras se encuentran inmersos en misiones espaciales.